Estoy chato. Estoy chato del colegio; de vivir para estudiar, trabajar y producir.
Cuando la vida empieza, uno va a un jardín infantil para aprender las cosas más básicas, para luego entrar al colegio. En el colegio, hay que sacarse buenas notas para poder entrar a la universidad. En la universidad, hay que matarse estudiando para conseguir un título, para luego trabajar... trabajar y luego jubilarse. Cuando uno ya se ha jubilado, recibe una mugre de pensión, con la que se supone, se deben pagar todas las necesidades que hayan. Luego uno se muere, y a nadie le va a importar cuantas noches las hayamos pasado en vela estudiando, o cuantas horas extras hayamos trabajado.
Con la jornada completa, uno sale más tarde del colegio. Y entrando a las 8:00 AM y saliendo a las 5:00 PM, ¿creen acaso los ineptos de mi colegio, que uno tiene muchas ganas de llegar a la casa con el saco de tareas, los versículos para memorizar, el tener que estudiar para las pruebas, los trabajos, los libros que hay que leer?
La vida no se hizo solo para estudiar y trabajar. Tarea en la semana... ¿Cuándo se descansa?; Tarea el fin de semana... ¿Cuándo se juega?; Memorizar el pasaje del mes, el versìculo de cada guía, y los rasgos del carácter... ¿Cuándo me relajo y estoy con mi familia?; Usar solo azul marino... ¿No creó acaso Dios muchos colores?
"No hay fin de hacer tantos libros,
No quiero pasarme la vida siguiendo un modelo que te obliga a convertir tu vida en monótono y aburrido camino. Porque, sinceramente, prefiero morirme antes de ver mi vida desperdiciada, habiendo dejando de lado las cosas que amaba, por convertirme en un profesional con título y exitoso.
Charles Chaplin - El Gran Dictador
David Rodríguez